Gracias por fumar

El hecho de que fumar sea dañino no tiene que ver con la ola de prohibiciones que la sociedad occidental le impuso a esta costumbre. Probablemente, las democracias y otros gobiernos que no lo son tanto, se sienten culpables de dejar que millones de personas fumasen sin hacerse cargo de la evidente carga venenosa que implica fumar y fumar enfrente de otros.

El tema, supuestamente, está mal entendido. Ok, convengámoslo. Fumar es como el pico. Si lo haces sostenidamente, lo que prueba de paso que el pucho tiene componentes adictivos, te vas a morir de una enfermedad asociada directamente. Si fumas enfrente de otros, le provocas daño a quien no lo está haciendo.

Pero hay un sutil elemento en todo esto. Como el cigarro no mata de un día a otro sino que provoca consecuencias por hacerlo, hay una desesperación notable por cercar su consumo y prohibirlo. En particular, Estados Unidos siente que su pueblo le exige una política de bien común al respecto luego de decenas de años ignorando el tema, y decenas de años profitando por el vicio de los demás.

Entonces, el cigarro deja de ser el problema. La ley se transforma en perseguidora y, como consecuencia directa, en la entidad cruel que disminuye las libertades individuales. La libertad que tengo del placer de fumarme un pucho.

Porque, puta la hueá, si me fumo un pucho, no soy un criminal. Es como la ley de tránsito. No hay paco disponible en la calle que persiga huevones que contaminan, que adelantan por las bermas o a huevones que doblan en segunda fila. Pero te estacionas un poquito en la raya amarilla y te cagan con 40 lucas.

Esto es lo mismo. El huevón que quiere fumarse un pucho, que se lo fume. Pero, por favor, para qué lo huevean si todo el mundo sabe que la hueá es dañina. Es un asunto de libertad personal.

En el día de hoy jueves se estrena la película más atrevida de los últimos años en el festival Sundance, que de independiente tiene poco ahora. Thank you for smoking tiene la gracia de estar presentada entre la ficción y el documental. Es entretenidísima. Y la idea es la siguiente. Tráenos tus cajetillas con cigarrillos, las botas en un tarro de basura y te damos entradas dobles para cualquier función. Se estrena hoy y tú eliges qué día vas y con quién. Si traes más que sólo un par de cajetillas te llevas algo más que dos entradas. Sólo por hoy entre 10 y 12.

P.D. RECIBIMOS HOY TAMBIEN SALUDOS Y PARABIENES POR EL DIA DEL TRABAJADOR RADIAL. UN GRAN SALUDO A TODOS MIS COMPAÑEROS Y A LOS COLEGAS DE CADA UNA DE LAS EMISORAS DE ESTE PAIS.